En estas fechas, nos hinchamos a comer, y raro es quien no acaba hinchado, otra cosa es tener vómitos, diarreas o picores. En este caso, puede que tengamos una alergia o una intolerancia. Una alergia alimentaria es una respuesta inmunitaria exagerada al tomar ciertos alimentos, mientras que una intolerancia, es la incapacidad (total o parcial) de digerirlos.
Éstos, son los alimentos que más frecuentemente generan alergias, una alergia al ser una reacción exagerada por parte de nuestro organismo hacia parte de los componentes de un alimento, puede causarnos desde picor, nauseas o hinchazon, a vómitos, diarrea o dificultades respiratorias. Hay alimentos cuyas estructuras son parecidas, por lo que es probable que no sólo tengamos alergia a un sólo alimento, sino a varios, aunque sea en menor medida.
En el caso de las intolerancias, las más comunes son al gluten y a la lactosa.
La intolerancia al gluten también se conoce como enfermedad celiaca o celiaquía. Es una enfermedad que daña el revestimiento del intestino delgado e impide la absorción de parte de los alimentos. Los síntomas se deben a la reacción con el gluten, que se encuentra en el trigo, la cebada, el centeno y la avena. Pero se encontraba en pequeñas cantidades en gran cantidad de alimentos debido a que se "contaminaba" con trigo la fabricación de otros muchos alimentos. Los síntomas más comunes son nauseas, vómitos, gases, distensión abdominal, heces flotantes, pérdida de peso...
En el etiquetado, deben buscar los símbolos de sin gluten, o fabricantes que se aseguran de no contenerlo. Las marcas están muy concienciadas y, además, usan como valor añadido a su producto la ausencia de gluten.
La intolerancia a la lactosa es la incapacidad para digerir la lactosa, un tipo de azúcar que se encuentra en la leche y otros productos lácteos. Pero que además, es añadida a infinidad de productos como sopas, margarinas, bolleria y panes industriales, companajes... sus síntomas más comunes son dolor abdominal, gases, nauseas, diarrea y distensión abdminal. Debido a la importancia de la leche en la dieta, y sobretodo, del calcio. Hay marcas que han desarrollados productos lácteos sin lactosa.
En ellos podemos encontrar la "etiqueta" de no lactosa, en productos recomendados por la Asociación de intolerantes a la lactosa, pero, fuera del grupo de lácteos, es muy importante mirar los ingredientes.
Se debe evitar tanto la lactosa, como sueros o leches en polvo, trazas de leche o lactitol (E966). No hay problema con las proteínas de leche, ya que la intolerancia es al azúcar de la leche no a sus proteínas, éstas están relacionadas con la alergia a la leche. Y otra opción es la leche de soja, al ser vegetal no contiene lactosa.
Para finalizar esta larga entrada:
- Quienes no padeceis ni alergias ni intolerancias, que los productos tengan, o no, lactosa o gluten, no os va a afectar en nada, por lo que no pagar por un "sin lactosa" más de lo que pagaríais por un producto normal.
- Hay unas pruebas que hacen en sangre que indican intolerancias... no es que sean un timo pero tampoco son certeras 100%, varían mucho en referencia a las comidas que hayas hecho antes de la prueba o a medicamentos que hayais tomado y están más relacionadas con las alergias.
- Si creeis que padeceis algo de lo antes mencionado, visitad a vuestro médico, será quién os marque las directrices a seguir.
Sólo me queda decir que...
¡¡¡FELIZ AÑO A TODOS!!!
¡¡Disfrutad los últimos momentos del 2011!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario